Tal y como se informó el día de hoy a través de un Comunicado de la Congregación Preciosa Sangre, el Colegio Santa Cecilia tiene una nueva Directora, la Hna. Gabriela Contreras a quien le damos una muy cordial bienvenida a nuestra Comunidad Educativa.
Inspirados siempre en el Evangelio y en los valores Cristianos que deseamos entregar a nuestras estudiantes, queremos agradecer y celebrar el camino recorrido durante los últimos 14 años bajo la gestión de Hna. Anabella Parra Muñoz, quién nació en Concepción el 3 de marzo de 1961, estudió en el Colegio Santa Cecilia de donde egresó en 1979. A 3 días de su salida de 4º Año Medio ingresó a la Congregación Preciosa Sangre, instituto donde se formó como religiosa.
En su trayectoria de formación profesional, estudió Pedagogía en Educación General Básica en la Universidad Católica egresando en 1986, luego se tituló como profesora de Educación Media en Matemática y Estadística en la Universidad Arcis en el año 2008 y recientemente en 2019 se tituló de Contador Auditor de la Universidad Uniacc. Además, ha cursado estudios en dirección y gestión escolar, catequesis, estudios religiosos, prevención de abusos, normativa laboral, Ley de Inclusión, reforma y educación particular, entre otros.
Como Religiosa ha realizado su servicio en los colegios CPS Pichilemu, CPS Purranque, Colegio Niño Jesús de Praga y Colegio Santa Cecilia, en donde comenzó como profesora de Matemática y Computación en el año 2004. Sólo cuatro años más tarde fue nombrada Directora, rol que ejerció hasta 2022 con gran entusiasmo, compromiso y carisma.
En 18 años de servicio en el Colegio Santa Cecilia trabajó con firme compromiso por la Pastoral Educativa, por la inclusión de estudiantes con necesidades educativas, y por mantener el sello de la espiritualidad de la Preciosa Sangre. Trabajó por la modernización tecnológica e implementó el área de comunicaciones y el equipo de convivencia escolar, durante la pandemia lideró el trabajo docente y supo dar una respuesta oportuna a las necesidades de las familias, implementando las clases online antes del primer mes de suspensión de clases presenciales, para el retorno presencial se preocupó de implementar estrictas medidas de seguridad y el equipamiento necesario para realizar clases híbridas.
A partir de hoy, 27 de febrero asume un nuevo desafío en su vida religiosa, el de animar y acompañar a otra Comunidad Educativa: el Colegio Niño Jesús de Praga en Rancagua.
A nombre de la Familia Ceciliana, agradecemos a Madre Anabella por sus años de servicio en medio nuestro, en donde la hemos visto cantar en misas, contar historias de Santos, enviar las pildoritas de la fe por whatsapp, visitar puerta a puerta a los profesores en su día, ayudar en la comunión, recortar recuerdos para retiros espirituales, presidir liturgias, participar en vídeos, salir de compras para la graduación y para la celebración de los cumpleaños, entre tantas otras labores en dónde demostró amar a su colegio y Congregación.
A nombre de todos los integrantes de la Familia Ceciliana decimos: ¡Muchas gracias Madre Anabella!